Tabla de Contenidos
La Tempestad es una comedia de Shakespeare que trata de un gran acto de traición, de abusos, del desarrollo de las artes mágicas y que desenvuelve una trama de venganza. Calibán, el esclavo terrenal de Próspero y al que los demás personajes se refieren a menudo como un monstruo, es el hijo de una bruja y el único verdadero nativo de la isla que aparece en la obra. Es un personaje extremadamente complejo, que refleja o parodia a varios otros personajes.
Calibán: espejo y contraste
Shakespeare escribió La Tempestad entre 1610 y 1611. La obra trata de Próspero, un hechicero que trama una venganza para recuperar su lugar como duque de Milán tras haber sido despojado de su título y obligado a exiliarse, junto con su hija Miranda, para luego refugiarse en una isla solitaria. Es en esta isla donde Próspero encuentra a Calibán, uno de los dos únicos seres que permanecen y ocupan la isla. En los primeros días, Calibán y Próspero se conocen y se llevan bien, hasta que cierto giro de los acontecimientos hace que su relación se convierta en una de esclavo y amo.
Calibán encarna tres ideas. En primer lugar, lo sobrenatural, ya que nació de la unión de una bruja y el diablo y, por lo tanto, está deformado. Con esta primera personificación, Calibán desarrolla un papel antagónico respecto al espíritu celestial de Ariel. Mientras que Ariel es un espíritu aéreo, Calibán es de tierra. Sus discursos giran en torno a manantiales, charcas de agua salada, ciénagas, pantanos, llanuras, o rosales y pinares.
Mientras que Ariel conserva su dignidad y su libertad sirviendo a Próspero de buen grado, Calibán alcanza un tipo de dignidad diferente al negarse, aunque sea de forma esporádica, a someterse a la intimidación de su amo.
Sorprendentemente, Calibán también refleja y contrasta a Fernando en algunos aspectos. Calibán y Fernando expresan su interés en desatar el «nudo virginal» de Miranda. Fernando planea casarse con ella, mientras que Calibán intenta violarla. El amor glorificado, romántico y casi etéreo de Fernando por Miranda contrasta fuertemente con el deseo de Calibán de fecundar a Miranda y poblar la isla con “calibanes”.
La apariencia de Calibán
El aspecto físico de Calibán es impreciso; todos los intentos de esbozar a este extraño ser han resultado inútiles. Es capaz de cavar castañuelas, arrancar bayas y atrapar a ágiles monos, pero Próspero le llama tortuga. Si embargo, en uno de sus discursos, Miranda lo equipara a un hombre cuando le dice a Fernando que en su vida sólo ha visto dos hombres: su viejo padre Próspero y el deforme Calibán. Pero en otro, lo excluye de la categoría de seres humanos.
Shakespeare debió de extraer parte del material utilizado para representar a Calibán de libros de viajes contemporáneos sobre extraños relatos de nativos de islas en diversas partes del mundo. Calibán simboliza una forma extraordinaria de monstruosidad y falta de escrúpulos cuando intenta violar a Miranda y cuando conspira contra su amo Próspero con el mayordomo Stéfano y el bufón Trínculo. Es ambas ocasiones, fue desterrado de la celda de Próspero y confinado en una roca.
Lo que le confiere cualidades sobrenaturales a Calibán es su herencia y deformidad corporal, así como las maldiciones que lanza constantemente a Próspero, sabiendo que será severamente castigado por ello. A esto se debe que muchos lectores lo llamen infeliz, ingrato e incorregible.
Su esclavitud
En La Tempestad, Calibán también encarna la esclavitud en la isla que Próspero ha usurpado. Calibán se resiente con razón de este hecho, ya que la isla debería haber sido suya por derecho tras la muerte de su madre, la malvada bruja Sycorax. En cambio, está esclavizado.
En la obra, el mismo Próspero ve y trata como un esclavo a Calibán, «visitaremos a Calibán, mi esclavo: hace nuestro fuego, trae nuestra leña y realiza servicios en cargos que nos benefician», dice. Sin embargo, como esclavo, Calibán odia a Próspero, su duro capataz. De hecho, odia todo servicio que este le solicita. Así, representa la esclavitud y la revuelta contra la esclavitud en todas sus formas.
Puede que Próspero haya «acariciado» en algún momento a Calibán y lo haya tratado con mucho cariño, pero, al fin y al cabo, Calibán es su esclavo y al propio Próspero no le importa llamarlo su esclavo sin sentirse avergonzado. Hablando con Stéfano, Calibán dice que Próspero es un tirano que le inflige todo tipo de castigos. La relación entre Calibán y Próspero es la de un esclavo y su dueño. No obstante, la reticencia de Calibán a cumplir las órdenes de Próspero muestra a un esclavo que se rebela contra la autoridad.
Fuentes
- Naishtat, F. (2016). Las figuras conceptuales de Ariel y Calibán en el caleidoscopio shakespereano de La tempestad y de su recepción francesa y latinoamericana. Lo bárbaro y lo civilizado a través de Renan, Darío y Rodó. Pilquen, 19(4).
- Ruiza, M., Fernández, T. y Tamaro, E. (2004). Resumen de La tempestad, de William Shakespeare. En Biografías y Vidas. La enciclopedia biográfica en línea. Recuperado de https://www.biografiasyvidas.com/monografia/shakespeare/tempestad.htm el 8 de junio de 2021.
- Hogarth, W. (2002). Ferdinand courting Miranda (from William Shakespeare’s The Tempest, Act I scene ii). The Yorck Project 10.000 Meisterwerke der Malerei (DVD-ROM), distributed by DIRECTMEDIA Publishing GmbH. ISBN: 3936122202.2. frankzumbach.wordpress.com, Dominio público.