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El interlenguaje es un concepto acuñado por el lingüista estadounidense Larry Selinker en 1972. Interlenguaje es el lenguaje intermedio que utiliza un individuo durante el proceso de aprendizaje y adquisición de una segunda lengua.
Qué es el interlenguaje: origen y definición
Para comprender mejor qué es el interlenguaje es importante conocer el origen de esta definición y sus características, y tener en cuenta los siguientes términos:
- Lengua materna o nativa: es la primera lengua que el estudiante aprendió desde su nacimiento.
- Lengua meta (o lengua objetivo): es la lengua que el estudiante desea aprender. Generalmente se utilizan los términos “segunda lengua” o “lengua extranjera”, pero puede tratarse de más de una lengua y de otros lenguajes que no sean extranjeros.
Origen de la teoría del interlenguaje
En la década de 1950, dentro de la lingüística aplicada, surgió la corriente del Análisis contrastivo, que sostenía que se podían predecir los errores que podían cometer los estudiantes mientras estudiaban una lengua extranjera. Para ello, se estudiaron las diferencias entre la lengua nativa o materna y la segunda lengua, considerando también que los errores se debían a la interferencia de la lengua materna.
Los estudios que se realizaron en este campo dieron paso al análisis de errores. Uno de los mayores referentes en el análisis de errores fue el lingüista británico Stephen Pit Corder (1918-1990) quien introdujo la idea de que el aprendizaje de una lengua es un proceso que tiene diferentes etapas de desarrollo, y que se puede estudiar a través del análisis de los errores que cometen los estudiantes.
Corder también fue el primero en distinguir como una lengua en sí misma al lenguaje que utilizan los estudiantes mientras aprenden otra lengua, diferente de la materna y de la segunda lengua. Esto quedó plasmado en su obra El significado de los errores del aprendiente, publicada en 1967, en la Revista internacional de lingüística aplicada en la enseñanza del lenguaje.
Las aportaciones de Larry Selinker
Sin embargo, fue el lingüista estadounidense Larry Selinker (1937-), quien en su obra Interlenguaje, publicada en el año 1972, denominó como “interlenguaje” al lenguaje intermedio que una persona utiliza durante el aprendizaje de otra lengua.
Selinker se basó en el trabajo de Corder y definió, de una manera más precisa, el concepto y las características del interlenguaje. Este concepto tuvo una gran aceptación y dio origen a nuevas investigaciones y sentó las bases del estudio de la adquisición de segundas lenguas. Además, generó un gran interés en el estudio del interlenguaje como lengua, y actualmente, es un objeto de estudio y un término clave en la Lingüística aplicada a la enseñanza del lenguaje.
Años más tarde, en 1981, Corder publicó su obra El análisis de errores y el Interlenguaje, y no solo adoptó este término, sino que remarcó la importancia de considerar a los errores del interlenguaje como una señal positiva del progreso del estudiante.
Definición de interlenguaje
La teoría del interlenguaje de Selinker sostiene que el lenguaje de los estudiantes de una segunda lengua se rige según reglas sistemáticas que son distintas a las del lenguaje que está aprendiendo y a las de su lengua materna. De esta manera, durante el proceso de aprendizaje, el estudiante no absorbe o copia la información que recibe sobre la lengua que está aprendiendo, sino que va incorporando todo y creando un nuevo sistema lingüístico, que es único y evoluciona a medida que adquiere una mayor competencia en la segunda lengua.
Justamente, ese lenguaje intermedio que surge en el proceso de aprendizaje de otra lengua, es lo que se define como “interlenguaje” o “interlengua”. El interlenguaje es una lengua propia del estudiante que se halla en constante evolución, la cual posee rasgos de su lengua materna y de la segunda lengua, así como características propias. Esto se puede representar mediante el siguiente esquema:
Lengua materna → interlenguaje → lengua meta
Para ilustrar y explicar aún mejor este proceso, Selinker utilizó la metáfora de un camino. El interlenguaje sería el recorrido que el individuo realiza desde su conocimiento de la lengua materna hasta el aprendizaje de la segunda lengua. A lo largo de ese viaje, el interlenguaje se renueva constantemente, aproximándose cada vez más a la lengua meta, hasta que adquiere el lenguaje propio de dicha lengua.
Características del interlenguaje
La interlengua, al igual que cualquier lengua, presenta características específicas. Por ejemplo, se caracteriza por:
- Cambiar constantemente.
- Ser diferente e independiente de la lengua materna y la lengua meta.
- Ser única e individual: cada estudiante desarrolla su propia interlengua, que es diferente de la de otro estudiante.
- Ser sistemática: posee un sistema de reglas dinámicas propias que se crean, eliminan o cambian.
- Ser permeable: absorbe nueva información constantemente.
- Ser variable: puede estar sujeta a una variación sistemática, que depende del contexto lingüístico, psicolingüístico y de la situación en que se encuentra el estudiante; o bien a una variación libre, cuando el estudiante utiliza elementos lingüísticos de forma arbitraria en un mismo contexto discursivo.
El desarrollo del interlenguaje
En el proceso de adquisición de una lengua nueva, el estudiante tiene como base la lengua nativa y comienza a desarrollar un interlenguaje propio que, a su vez, se va adaptando, modificando y reemplazando por versiones más nuevas y complejas a medida que progresa en su aprendizaje de la lengua meta. Es decir, el desarrollo del interlenguaje está sujeto a transformaciones constantes que cada estudiante lleva a cabo de forma natural hasta aprender la lengua meta.
No obstante, existen factores que influyen en el desarrollo del interlenguaje, y que forman parte natural del proceso de adquisición de la lengua meta. Estos factores son:
- La sobregeneralización o hipergeneralización, que sucede cuando los estudiantes tienden a aplicar una regla que ya conocen en todos los casos, sin tener en cuenta las excepciones o posibles variantes. Por ejemplo: conjugar de la misma manera a los verbos regulares e irregulares.
- Las estrategias de aprendizaje, que son las formas en que el estudiante intenta facilitar su comprensión y producción oral o escrita en la segunda lengua. Generalmente, esto se manifiesta por medio de la simplificación: el uso de estructuras sencillas en vez de utilizar un vocabulario más complejo, que a lo mejor desconoce o le cuesta recordar. Por ejemplo, en inglés: the man and the woman / “el hombre y la mujer”, en vez de decir the couple / “la pareja”.
- La transferencia de idiomas: ocurre cuando el estudiante aplica su conocimiento de las lenguas que ya sabe para aprender la nueva lengua. Generalmente, son las reglas y patrones de la lengua materna del estudiante, que este aplica a la nueva lengua.
- La transferencia de instrucción: esta es la influencia del docente y de las metodologías que use para la enseñanza, así como su corrección y eficiencia.
- Las estrategias de comunicación: esto se da, principalmente, en el lenguaje oral, cuando se prioriza la fluidez en vez de la precisión.
El interlenguaje y la fosilización
Teniendo en cuenta todo lo anterior, se puede concluir que el desarrollo del interlenguaje es algo natural y normal durante el proceso del aprendizaje de una lengua. De hecho, es incluso algo positivo, porque permite comprobar el progreso del estudiante a lo largo de todo ese proceso evolutivo.
Generalmente, el interlenguaje da paso al dominio de la lengua meta. Sin embargo, en ocasiones, se produce un proceso al cual Selinker denominó “fosilización”. Este término está ligado al interlenguaje porque se trata de un estancamiento en el aprendizaje. La interlengua deja de renovarse y transformarse y se detiene su progreso, por lo tanto “se fosiliza”.
Esto da como resultado que el estudiante repita los mismos errores, conserve los mismos sistemas y reglas de su lengua nativa y, en el peor de los casos, que no alcance el dominio máximo esperado de la lengua meta, sin importar cuánto conocimiento haya adquirido. A este “congelamiento” del desarrollo del interlenguaje y la posterior llegada a la lengua meta, se lo denomina fosilización.
La fosilización se debe a diferentes factores, tanto cognitivos, como psicológicos, biológicos y sociales. Estos son algunos de ellos:
- La falta de motivación.
- Incapacidad para salir de la zona de confort una vez que se adquirieron los conocimientos básicos.
- La presión comunicativa.
- Poca exposición al entorno donde se habla la lengua meta.
- La retroalimentación que recibe el estudiante cuando utiliza la lengua meta.
- La transferencia lingüística, la interferencia de su lengua nativa u otras lenguas.
- La falta de interés en la cultura de la lengua meta.
- La edad del estudiante.
La importancia del interlenguaje
Desde las primeras definiciones y descripciones del interlenguaje que realizaron Corder y Selinker, su estudio ha sido de vital importancia tanto para el estudiante como para el docente y el campo de la lingüística aplicada.
Al analizar los componentes y el desarrollo del interlenguaje del estudiante, se puede comprobar su progreso, saber en qué etapa se encuentra y cuáles son sus principales desafíos a la hora de aproximarse a la lengua meta. Sabiendo esto, el docente puede aplicar recursos didácticos más adecuados para que su enseñanza sea un éxito y el alumno alcance el dominio máximo del lenguaje que está aprendiendo.
Por otro lado, dentro de la lingüística aplicada, el estudio del interlenguaje permite detectar todos los obstáculos en el proceso de adquisición de la lengua y crear nuevas metodologías para una mejor enseñanza.
Ejemplos de interlenguaje
Los ejemplos de interlenguaje son innumerables, ya cada estudiante es diferente y construye su propia interlengua que, a su vez, cambia a medida que transcurre su proceso de aprendizaje y se aproxima a más a la lengua meta. Algunos ejemplos de interlenguaje son, justamente, los errores que comete al intentar comunicarse en la lengua que está aprendiendo:
- Uso de fonemas y grafemas distintos al de la lengua meta, porque la lengua nativa no los tiene: “b” en vez de “p”, en los estudiantes árabes que aprenden español como lengua extranjera.
- Cambios en el orden sintáctico: a flower red en vez de a red flower / “una flor roja”, en alumnos españoles que estudian inglés.
- Conjugación de un verbo irregular como si fuera regular: flied en vez de flew / “voló”.
- Uso de palabras que tienen otro significado en la lengua meta (lo que se conoce como “falsos amigos” o “cognados”): el uso de la palabra inglesa sensible /”prudente” en vez de sensitive / “sensible”.
Fuentes
- Moreno Cabrera, J. C. Cuestiones clave de la lingüística. (2013). España. Síntesis.
- Balbino de Amorím Barbieri Durao, A. La interlengua. (2007). España. Arco Libros.
- Garayzábal Heinze, E.; Codesido García, A. I. Fundamentos de Psicolingüística. (2015). España. Síntesis.
- Selinker, L. (1972). Interlanguage. IRAL: International Review of Applied Linguistics in Language Teaching, 10, 209-231. Disponible aquí.
- Centro Virtual Cervantes. Fosilización. Disponible aquí.
- Manga, André-Marie. La noción de interlengua y el fenómeno del error en la enseñanza/aprendizaje del español como lengua extranjera. Revista Electrónica de Estudios Filológicos. (2011, 21 de julio). Disponible aquí.
- Torras, M. R. (1994). La interlengua en los primeros estadios de aprendizaje de una lengua extranjera (inglés). Universidad de Barcelona. Disponible aquí.
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