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Brian David Mitchell y su esposa, Wanda Barzee, secuestraron a Elizabeth Smart el 5 de junio de 2002. Elizabeth Smart tenía 14 años al comienzo del secuestro; Brian David Mitchell la mantuvo cautiva durante 9 meses, violándola repetidamente. Brian David Mitchell creía ser un enviado divino y fue diagnosticado por los sicólogos forenses de tener desordenes de personalidad antisociales y narcisistas. Fue condenado a cadena perpetua en Salt Lake, en el estado de Utah, en los Estados Unidos.
Brian David Mitchell nació el 18 de octubre de 1953 en Salt Lake City, Utah, Estados Unidos. Fue el tercero de los seis hijos que nacieron en el hogar mormónde Irene y Shirl Mitchell. Su madre era maestra de escuela y su padre trabajador social. Eran vegetarianos y criaron a sus hijos con una dieta a base de pan integral y verduras cocidas al vapor. Los vecinos de la familia la veían extraña, pero no problemática. Brian era un niño de comportamiento normal e Irene era una madre cariñosa.
Sin embargo, el padre tenía una forma de educar peculiar. Cuando Brian tenía 8 años intentó enseñarle cuestiones sobre el sexo mostrándole imágenes de una revista médica, y también puso al alcance del niño otros libros de orientación sexual pensados para adolescentes. Más tarde, cuando Brian tenía 12 años, el padre intentó inculcarle la capacidad de actuar con independencia y la autosuficiencia, y una vez lo dejó solo en un área desconocida de la ciudad con instrucciones para que volviera a casa por sus propios medios. A medida que Brian crecía, también lo hacía el cuestionamiento a sus padres y comenzó a aislarse en un mundo propio.
Cuando tenía 16 años fue condenado por exponerse semidesnudo frente a un niño y fue recluido en un instituto para delincuentes juveniles. El estigma de su acto alejó a Brian de sus compañeros. Las discusiones entre Brian y su madre eran constantes, y finalmente esta tomó la decisión de enviar a Brian a vivir con su abuela. Poco después, Brian abandonó la escuela y comenzó a consumir drogas y alcohol.
Los matrimonios de Brian David Mitchell
Brian David Mitchell se casó con Karen Minor tras quedarse embarazada; él tenía 19 años y Karen 16. Tuvieron dos hijos en los dos años que estuvieron juntos. Cuando terminó su tormentosa relación, Brian David Mitchell obtuvo la custodia de los niños debido a las supuestas infidelidades y abuso de drogas de Karen. Karen se volvió a casar y recuperó la custodia legal de sus hijos, pero Mitchell llevó temporalmente a los niños a New Hampshire para evitar que regresaran con su madre.
En 1980 Brian David Mitchell se convirtió en miembro activo de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, después de que su hermano regresara de una misión religiosa y le contara sus experiencias. Brian dejó de consumir drogas y alcohol. En 1981 se casó con su segunda esposa, Debbie Mitchell, que tenía tres hijas de un matrimonio anterior. Además de los tres hijos de Debbie y los dos de Brian, los Mitchell tuvieron dos hijos más pocos años después de su boda.
El matrimonio de Debbie y Brian se tornó conflictivo. Los dos hijos de Mitchell fueron enviados a hogares de acogida. Debbie afirmaba que Brian pasó de ser amable a controlador y abusivo, decidiendo los objetos que podía usar y lo que podía comer, y tratando de asustarla. Su interés en Satanás la perturbaba, aunque Brian afirmaba que solo estaba aprendiendo sobre su enemigo. Mitchell solicitó el divorcio en 1984, alegando que Debbie era violenta y cruel con sus hijos, y que los estaba volviendo en su contra.
Un año después de su separación Debbie denunció a Brian ante las autoridades debido a sus sospechas de que hubiera abusado sexualmente de su hijo de 3 años. Un trabajador social que analizó el caso no pudo relacionar a Brian David Mitchell con la situación de abuso sexual, pero recomendó que se supervisaran las futuras visitas con el niño. La hija de Debbie acusó a Brian de abusar sexualmente de ella durante cuatro años; Debbie denunció el abuso a los líderes de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días en la que Brian era miembro activo, pero se le recomendó que lo dejara pasar.
El mismo día en que Debbie y Brian se divorciaron, él se casó con con Wanda Barzee, una mujer divorciada de 40 años que tenía seis hijos. La familia de Wanda Barzee aceptó a Mitchell, aunque les parecía que era extraño. Algunos de los hijos de Wanda Barzee se mudaron con ellos, pero encontraron que la casa era cada vez más extraña y peligrosa debido al comportamiento excéntrico de Mitchell.
La gente de su entorno veía a la pareja como ciudadanos mormones normales y trabajadores. Brian David Mitchell trabajaba como troquelador y participaba activamente en la iglesia, pero familiares y amigos cercanos eran conscientes de su tendencia a desarrollar actos violentos, de los que a menudo Wanda Barzee era la víctima. Los puntos de vista religiosos de Brian se estaban volviendo cada vez más radicales, que se traducía en una difícil relación con otros miembros de la iglesia. Sus referencias a Satanás durante los rituales se había tornado extrema, y los líderes de la iglesia le pidieron que bajara el tono.
Una noche, los Mitchell despertaron a uno de los hijos de Wanda Barzee y le dijeron que acababan de hablar con ángeles. El ambiente en el hogar cambió drásticamente y los hijos de Wanda se mudaron al no poder soportar la situación. En la década de 1990 Brian Mitchell cambió su nombre a Emmanuel, rompió su vínculo con la iglesia y se proclamó profeta de Dios, anunciando visiones apocalípticas. Cuando la pareja regresó a Salt Lake City, Brian David Mitchell había cambiado su apariencia, mostrándose con una imagen similar a la de Jesús, con una barba larga y con una túnica blanca. Wanda Barzee se llamaba a sí misma adoratriz de Dios y permanecía a su lado como una discípula cariñosa. Ambos estaban permanentemente en las calles del centro de la ciudad. Sus familiares tenían poca relación con la pareja y trataban a los viejos amigos y conocidos como extraños cuando se los encontraban.
El secuestro
El 5 de junio de 2002 Brian David Mitchell secuestró a Elizabeth Smart de su propia habitación en casa. Su hermana Mary Katherine, de 9 años, fue testigo del secuestro. La familia de Elizabeth la buscó intensamente, apareciendo en televisión, y reunieron más de 2000 voluntarios para su búsqueda, pero no pudieron encontrarla. Unos meses más tarde, la hermana de Elizabeth identificó la voz Brian David Mitchell como la del secuestrador, Emmanuel, que había realizado algunos trabajos para la familia Smart. Pero la policía no consideró creíble la declaración de la niña.
La familia Smart contrató a un dibujante para hacer un retrato robot su rostro y lo publicó en Larry King Live, en las calles y en sitios de Internet. Brian David Mitchell, Wanda Barzee y Elizabeth Smart fueron encontrados nueve meses después del secuestro cuando una pareja reconoció a Mitchell a través del programa America’s Most Wanted, al verlo caminando junto a dos mujeres por una calle de Sandy, en el estado de Utah.
Brian David Mitchell fue llevado a juicio, en el que la defensa argumentó locura. Elizabeth Smart testificó que fue violada repetidamente y obligada a ver películas pornográficas, así como a consumir alcohol durante su cautiverio. El argumento de la defensa no se sostuvo, por lo que Mitchell fue condenado el 11 de diciembre de 2010. El jurado encontró a Brian David Mitchell culpable de secuestro con la intención de involucrar a la menor en actividades sexuales que fueron consumadas, y lo condenó a cadena perpetua, a cumplir en una prisión de alta seguridad del estado Arizona. Wanda Barzee también fue condenada a prisión por el secuestro; salió de la cárcel, en libertad condicional, en septiembre de 2018.
Fuentes
Actas del juicio contra Brian David Mitchell. Consultado diciembre de 2021.
CNN Elizabeth Smart Fast Facts. Consultado diciembre de 2021.
Maggie Haberman, Jean McIntoch. Held captive. Avon Books, 2003.
