En física en general, el estado fundamental de un sistema se define como su menor nivel energético permitido o posible, pudiéndose aplicar esta definición tanto a un átomo como a una molécula o a un ion. En otras palabras, el estado fundamental representa la configuración más estable de un sistema. Si hay más de un estado fundamental posible se dice que existen estados degenerados. Aunque el estado fundamental de un sistema esté asociado a un cierto nivel energético, se considera que tiene «energía cero» respecto de otros niveles de energía posibles para ese sistema. Estos niveles de mayor energía respecto del estado fundamental se denominan estados excitados de un sistema.
Los electrones son un buen ejemplo de estado fundamental y de estados excitados. Si un electrón cercano a un núcleo atómico absorbe energía, puede pasar (también se dice «saltar») a un estado excitado, y entonces pasa a moverse en otra zona más cercana al núcleo del átomo, en un nivel de energía mayor. En algún momento el electrón volverá a orbitar en el estado fundamental, emitiendo un fotón o cuanto de energía en el proceso, es decir, emitiendo el equivalente a la diferencia de energías entre el estado excitado y el fundamental.
Referencias
https://www.um.es/LEQ/laser/Ch-2/F2s1p2.htm
https://elfisicoloco.blogspot.com/2012/11/fundamental-excitado-o-ionizado.html