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En el ciclo de vida de muchos insectos se desarrolla lo que se conoce como metamorfosis: una serie de drásticos cambios fisiológicos que ocurren desde que están en el huevo hasta el desarrollo del organismo adulto.
La metamorfosis puede ser simple, también llamada incompleta; este es el caso de los saltamontes, cuyos estadios juveniles se asemejan al adulto y no hay una etapa de inactividad de los organismos. También puede ser completa, como en el caso de las mariposas, los escarabajos y las avispas; en este tipo de metamorfosis, las características de los organismos en las etapas de su desarrollo son completamente diferentes.
La pupa es uno de los estados de la metamorfosis completa: es el proceso en el que el estadio de larva pasa al de organismo adulto, llamado imago. O sea, es cuando el gusano se convierte en mariposa.
La apariencia externa de una pupa sugiere inactividad, pero en su interior transcurren complejos procesos biológicos; se desarrollan patas y alas en un cuerpo completamente diferente al de la larva, el cual constará de cabeza, tórax y abdomen.
En su estado de pupa los organismos no se alimentan y suelen estar inmóviles; el proceso puede durar un par de semanas o ser un estadio en el cual el organismo espera que las condiciones externas sean adecuadas para su desarrollo. Por ejemplo, algunos insectos permanecen en estado de pupa durante el invierno e incluso algunas especies pueden permanecer así durante años.
También se conoce como crisálida a la pupa de muchas mariposas, como la de la figura superior. Las crisálidas suelen desarrollarse colgadas de un apéndice. En algunos casos, la pupa desarrolla una contención que la envuelve durante su desarrollo, que se denomina capullo. Este es el caso del gusano de seda (Bombyx mori), que construye su capullo en un solo hilo de seda, muy fino y largo; este hilo se puede recuperar antes de que el insecto lo rompa para emerger y se utiliza para elaborar tejidos.
Las pupas tienen diferentes características que se pueden agrupar en cinco tipos no excluyentes, ya que una pupa puede reunir las características de uno o de dos de estas clases.
La pupa obtecta
La primera clase de pupa agrupa a aquellas en que los apéndices del insecto se fusionan con su cuerpo a medida que el exoesqueleto se desarrolla y se endurece. Se denomina pupa obtecta y muchas de ellas se desarrollan dentro de un capullo.
El orden díptera consta de más de 160.000 especies e incluye insectos como las moscas, mosquitos y tábanos; muchos de ellos desarrollan pupas obtectas. Esta pupa también se presenta en algunos lepidópteros (mariposas), himenópteros (hormigas, abejas y avispas) y también algunos coleópteros (escarabajos).
La pupa exarada o exarata
En contraposición a la pupa obtecta se define la pupa exarada o exarata, que se caracteriza por tener los apéndices del organismo libres durante el desarrollo de la pupa, aunque en general permanecen inactivos. Las pupas exaradas suelen carecer de capullo. La mayoría de las pupas que tienen estas características son pupas exaradas.
La pupa déctica
Un elemento que caracteriza a las pupas es el desarrollo de mandíbulas articuladas. A las pupas que tienen mandíbulas móviles que el organismo puede utilizar para morder se las denomina pupas décticas. Las pupas décticas tienden a ser activas y siempre pertenecen a la clase de pupas exaradas, con apéndices libres.
La pupa adéctica
Las pupas que carecen de mandíbulas funcionales y que no pueden morder para salir de su caja pupal o para defenderse, se denominan pupas adécticas. En este caso, la pupa se libera de su caja pupal segregando un líquido que la disuelve. Las mandíbulas están unidas a la cabeza de tal manera que permanecen inmóviles durante el desarrollo de la pupa. Las pupas adécticas pueden ser tanto obtectas como exaradas.
Las pulgas y otros parásitos, al igual que algunos miembros de los órdenes díptera, coleóptera e himenóptera, desarrollan pupas exarada y adécticas. Hay insectos de los órdenes díptera, lepidóptera, coleóptera e himenóptera que tienen pupa exarada y déctica.
La pupa coartada
La quinta clase de pupa se refiere a aquellas que se desarrollan dentro de la última capa de la larva, que se endurece actuando como capullo. Se denominan pupas coartadas. Este tipo de pupa tiene los apéndices libres, por lo que también son pupas exaradas. Son las pupas de las moscas (orden díptera, suborden Cyclorrhapha o Brachycera).
Fuentes
- Capinera, John L. Encyclopedia of Entomology. Segunda edición, Springer, 2008.
- Coronado, R. R.; Márquez, P. A. Introducción a la entomología. Morfología y taxonomía de los insectos. Limusa, México, 1885.
- Glosario de entomología. https://www.fumigacontinente.com.ar/glosario
- Resh, Vincent H. Encyclopedia of Insects. Editor Ring T. Carde, segunda edición, Academic Press, 2009.
- Costa, C; Ide, S. Insectos inmaduros: metamorfosis e identificación. Glosario. Disponible en http://sea-entomologia.org/PDF/M3M5/207_218_Glosario.pdf
