El lovebug (Plecia nearctica), el «insecto del amor», es una especie que se encuentra en América Central y en el sudeste de los Estados Unidos, a lo largo de la costa del Golfo de México. Este insecto díptero tiende a pulular en los bordes de las carreteras, cruzándolas en grandes cantidades e impactando los parabrisas de los vehículos que circulan, con el consiguiente riesgo de colisión al chofer verse impedido de ver el camino.
Según su clasificación taxonómica, el lovebug es la especie Plecia nearctica de la familia Bibionidae, del orden Diptera, de la clase Insecta. Son insectos negros con el tórax rojo, y la mayoría de las veces se los puede ver volando en parejas apareadas, macho y hembra unidos, como muestra la figura siguiente. Son originarias de América del Sur, pero se fueron desplazando hacia América Central.
Son insectos inofensivos, no muerden ni pican, ni son una amenaza para los cultivos o para las plantas ornamentales. Sus larvas cumplen una función muy útil en los ecosistemas, ya que son eficientes degradando la materia orgánica de origen vegetal, contribuyendo así a enriquecer los suelos.
El lovebug se aparea dos veces por año; en primavera y a fines del verano. Y lo hacen en forma masiva. Primero, un enjambre de unos 40 machos se suspende en el aire. Las hembras que buscan el esperma de los machos vuelan hacia el enjambre y las parejas se unen rápidamente, trasladándose hacia alguna planta del entorno. Después del apareamiento, la pareja permanece unida durante bastante tiempo, alimentándose juntos de néctar tal como muestra la figura superior, y buscando un sitio para depositar los huevos fertilizados.
Es en la época da apareamiento cuando el lovebug se vuelve peligroso para los automovilistas, que súbitamente pueden encontrarse conduciendo el vehículo en medio de un enjambre de estos insectos, muchos de los cuales terminan aplastados contra el parabrisas. En algunos casos pueden cubrir completamente el automóvil, interrumpiendo incluso el flujo de aire hacia el interior del auto y produciendo el sobrecalentamiento del motor. Es importante eliminar rápidamente los restos de lovebug de las superficies de los autos, ya que al descomponerse al sol dañan la pintura.
Por ello, si se transitó en medio de un enjambre de lovebug, es importante limpiar cuidadosamente la parrilla del radiador y eliminar sus restos de todas las superficies del automóvil. No se recomienda el uso de insecticidas para su control, ya que si bien son molestos, también cumplen un rol importante en el ecosistema, pues sus larvas eficientes degradando la materia orgánica de origen vegetal como ya se ha mencionado, al tiempo que los adulos son excelentes polinizadores.
Fuente
Denmark, Harold, Mead, Frank, Fasulo, Thomas Lovebug,Plecia nearctica Hardy. Featured Creatures. Universidad de Florida, 2010.