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Las culturas mesoamericanas como los olmecas, los mayas y los aztecas, surgieron y se desarrollaron en diferentes regiones y períodos históricos, e incluso, en varios casos, de manera simultánea. Debido a ello, se establecieron diferentes líneas de tiempo para estudiar y comprender mejor la historia de Mesoamérica. La cronología tradicional de las culturas mesoamericanas se divide en tres grandes períodos: el Período Preclásico o Formativo, el Período Clásico y el Período Posclásico.
Mesoamérica: origen y significado
La palabra Mesoamérica está formada por el prefijo meso– que quiere decir «centro» o «medio» y la palabra América, nombre del continente homónimo.
Mesoamérica es un término que se acuñó para denominar al área cultural e histórica que comprende el sur de México y varios países de Centroamérica: Guatemala, Belice, El Salvador, Honduras, Nicaragua y parte de Costa Rica. En esta región se desarrollaron civilizaciones que compartieron características, atravesaron procesos similares o progresaron siguiendo determinados patrones.
En 1939, ante la necesidad de encontrar una forma de denominar a los procesos culturales de diferentes pueblos ubicados dentro de una misma región y en un contexto histórico similar, el antropólogo estadounidense Alfred Kroeber creó el concepto de «área cultural». Esto sucedió durante sus estudios sobre pueblos aborígenes en Nuevo México (Estados Unidos), México y Perú.
En 1943, el antropólogo alemán Paul Kirchhoff utilizó el término Mesoamérica como título de su artículo, donde marcó los primeros límites geográficos de esta región cultural, cuna de los mayas y otras civilizaciones americanas. En ese momento, los límites se establecieron entre el sur de México y Costa Rica.
Características de Mesoamérica
En Mesoamérica surgieron algunas de las civilizaciones más importantes del continente americano, las cuales tuvieron características comunes entre sí y se diferenciaron de las culturas de otras regiones. Además, a lo largo del tiempo, las culturas mesoamericanas pasaron por distintos procesos históricos, evolutivos, tecnológicos y culturales, así como momentos de auge y declive; todo esto hasta que desaparecieron o dieron origen a otras civilizaciones. Algunas de las culturas mesoamericanas más desarrolladas fueron la olmeca, la teotihuacana, la maya, la azteca y la tolteca, entre otras. Sus características principales incluyeron:
- Asentamientos desde el sur de México hasta Costa Rica. En tierras altas, principalmente en el centro del territorio geográfico y en tierras bajas de la costa del Pacífico y el golfo de México.
- Desarrollo dentro de las siguientes áreas culturales: el centro de México, Oaxaca, Guerrero, la península de Yucatán, México occidental, el norte de México y Centroamérica.
- Práctica de la agricultura de subsistencia y el maíz como base de la alimentación.
- Religión politeísta.
- Escritura glífica.
- Uso del calendario.
- Sacrificios humanos.
- Otras de arte relacionadas con rituales religiosos, la ideología o el poder político.
Cronología de Mesoamérica
Para comprender mejor el marco histórico y las características de cada cultura y su evolución el tiempo, se establecieron diferentes cronologías. La más aceptada es la cronología convencional o tradicional, que tiene en cuenta al desarrollo de la cultura maya como eje del contexto histórico. Este período recibe el nombre de Período Clásico. Los acontecimientos anteriores a la existencia de los mayas se encuentran dentro del Período Preclásico. Siguiendo la misma lógica, los eventos que ocurrieron después de los mayas se encuadran dentro del Período Posclásico. Por último, se describe el Período Colonial, que marca el fin de Mesoamérica durante la conquista española.
El proceso de periodización de Mesoamérica
Una versión simplificada de esta cronología se comenzó a implementar en el siglo XIX, cuando surgió un mayor interés en los mayas y se produjo el «redescubrimiento» de esta cultura, gracias a las publicaciones del explorador estadounidense John Lloyd Stephens y del explorador inglés Frederick Catherwood.
A principios del siglo XX, la arqueóloga estadounidense Zelia Nuttal presentó sus hallazgos arqueológicos de cerámica en Coyoacán, mientras que el arqueólogo mexicano Manuel Gamio encontró piezas similares en la parte occidental de la Cuenca de México. Estos hallazgos motivaron a otros científicos a buscar la conexión con otras piezas de cerámica de la época. Uno de ellos fue el antropólogo alemanoestadounidense Franz Boas, que realizó varias excavaciones y logró la periodización de otros objetos descubiertos; más tarde, Boas se convertiría en el director de la Escuela Internacional de Arqueología y Etnología.
Basándose en los resultados de las investigaciones anteriores, el antropólogo estadounidense Herbert Spinden concluyó que debía haber existido un período arcaico, anterior a los conocidos hasta el momento, y propuso una cronología que incluía a Mesoamérica.
Otros criterios para la periodización de Mesoamérica
En la década de 1940, el arqueólogo Alfonso Caso, el historiador Wigberto Jiménez Moreno, el antropólogo Pedro Arnillas y otros investigadores mexicanos extendieron los criterios de la cronología. En 1951, el arqueólogo y antropólogo estadounidense Robert Wauchope acuñó el término «Preclásico» y en los años siguientes se acuñaron los términos «Epiclásico», «Formativo» y «Posclásico», entre otros.
A medida que se realizaron nuevas excavaciones en Mesoamérica y surgieron técnicas y tecnologías más avanzadas, se recopilaron más datos y se logró organizar la línea temporal que se utiliza en la actualidad. Cabe destacar que, a lo largo de los años, esta cronología tuvo y sigue teniendo modificaciones, según los nuevos datos que se obtienen en las investigaciones. Por ende, los tiempos especificados son flexibles, se basan en los hallazgos hasta la actualidad y están sujetos a cambios cuando se producen nuevos descubrimientos.
Para poder clasificar y comparar los diferentes momentos históricos en la línea de tiempo, se tomaron en cuenta como criterios la forma de subsistencia; las relaciones sociales; las relaciones político-económicas a nivel regional e interregional; las relaciones políticas hegemónicas; las relaciones políticas de dominio centralizado y el proceso de la conquista española que constituyó el fin de Mesoamérica.
Cronología tradicional
La cronología tradicional contempla la historia de Mesoamérica desde los tiempos anteriores a la cultura Clovis, que se considera la más antigua del continente americano. A partir de allí, existe el Período Preclovis (25000-10000 a.C.), el Período Paleoindio (10000-7000 a. C.) y el Período Arcaico (7000-2500 a.C.). Durante estos períodos, los hombres eran nómadas y se dedicaban a la recolección y la caza. Durante el Período Arcaico, los pueblos originarios comenzaron a practicar la agricultura y a seguir un estilo de vida más sedentario. Esto dio origen a sociedades más organizadas que se desarrollaron en los siguientes períodos:
- Período Preclásico
- Período Preclásico Temprano (2500-900 a. C.)
- Período Preclásico Medio (900-300 a. C.)
- Período Preclásico Tardío (300 a. C. – 200/250 d. C.)
- Período Clásico
- Período Clásico Temprano (200 o 250-600 d.C.)
- Período Clásico Tardío (600-800 o 900 d.C.)
- Período Clásico Terminal (650 o 700–1000 d.C.)
- Período Posclásico
- Período Posclásico Temprano (900 o 1000–1250 d.C.)
- Período Posclásico Tardío (1250-1521 d.C.)
- Período Colonial (1521-1821 d. C.)
Al Período Preclásico también se lo conoce como Período Formativo, ya que se cree que fue allí cuando se iniciaron las costumbres y tradiciones que más tarde alcanzarían su máximo desarrollo en el Período Clásico.
El Período Preclásico
El Período Preclásico se extendió desde, aproximadamente, el 2500 a.C. y el 200 d.C. Este período se destacó por el sedentarismo agrícola, la jerarquización social y el surgimiento de las capitales protourbanas. También se produjeron avances en la escritura, a través de inscripciones epigráficas, y especialmente, la creación del calendario. En esta etapa también se comenzó a adorar al jaguar y a otros dioses.
El Período Preclásico Temprano
El Período Preclásico Medio
El Período Preclásico Medio abarca los años 900 a 300 a. C. y se caracterizó por una gran transformación social. Se consolidó la estratificación de la sociedad y aumentó la desigualdad entre los habitantes. La clase política y de élite disfrutaban de mayores beneficios y poder. En esta etapa se crearon sistemas de riego y acueductos, y comenzó el proceso de urbanización. Las rutas de comercio se extendieron hasta Costa Rica, favoreciendo el intercambio de todo tipo de objetos, incluso de materia prima exótica, como la jadeíta guatemalteca.
Durante este período, los sitios poblados más importantes continuaron siendo La Venta y Tres Zapotes y Oaxaca. Además, hubo otros asentamientos en México Central y Chiapas y surgieron los primeros centros mayas, especialmente en Kaminaljuyú, Guatemala.
El Período Preclásico Tardío
El Período Preclásico Tardío se extendió desde el 300 a. C. hasta el 200 o el 250 d.C. aproximadamente. Se distinguió por el aumento de la población y la aparición de las ciudades-estados. Aunque se produjo el declive la cultura olmeca, otras zonas tuvieron un mayor desarrollo. Se destacó el área maya, en las localidades de Mirador, Calakmul, Tikal, Uaxactún, Lamanai y Cerros, entre otras, así como Teotihuacán, en México Central. En Tres Zapotes, surgió la cultura epiolmeca, que recibió una gran influencia de los olmecas, pero no logró alcanzar el mismo esplendor.
Período Clásico
El Período Clásico se extendió desde el 200 o 250 d. C. hasta el 1000 d.C. Las sociedades se distinguieron por una mayor complejidad y organización y continuaron dependiendo de la agricultura y del intercambio con otras regiones.
Además, realizaron importantes avances en la arquitectura y la artesanía, con la construcción de centros ceremoniales con fachadas de piedra y pinturas al fresco. Este período se distinguió también por el aumento de la inestabilidad en las relaciones políticas y en las clases dirigentes. También hubo otros factores negativos como superpoblación, cambios climáticos y degradación del suelo.
Período Clásico Temprano
El Período Clásico Temprano, que abarca la etapa a partir de los años 200 o 250 d. C. hasta el 600 d. C., se caracterizó por el desarrollo de Teotihuacán como metrópolis en el valle de México. Se cree que la cultura teotihuacana llegó a contar con una población de más de 100.000 habitantes. Esta fue la cultura de mayor apogeo en este período. Otro centro importante fue El Tajín, donde floreció la cultura totonaca. La cultura zapoteca en Monte Albán expandió su dominio en el valle de Oaxaca.
En el área maya, se encontraron numerosas estelas sobre la vida y las hazañas de los gobernantes, lo que indica un mayor desarrollo artístico y político. En este período también prosperaron la cultura zapoteca en Oaxaca y la cultura teuchitlana en Teuchitlán, en el oeste de México.
El Período Clásico Tardío
Entre los años 600 d.C. y 800 o 900 d. C. se produjo el declive de Teotihuacán y la cultura zapoteca en Oaxaca, pero continuaron creciendo cada vez más las comunidades en Yucatán, el área maya. Principalmente en las localidades de Tikal, Palenque, Uxmal, Yaxchilán y Copán, entre otras. La civilización maya tuvo un gran desarrollo matemático, astronómico, arquitectónico y artístico, mediante la construcción de enormes templos, edificios y murales.
Este período se caracterizó por la inestabilidad política y la reorganización de los asentamientos, así como algunos cambios en las prácticas religiosas y un aumento de la militarización.
Período Clásico Terminal (650/700 – 1000 d. C.)
En este período continuó la reorganización política en las tierras bajas mayas y la concentración del poder en el norte de Yucatán. Las construcciones arquitectónicas de la época muestran la estrecha relación económica, ideológica y religiosa entre el centro de México y el norte de las tierras mayas.
Alrededor del 800 d. C. se introdujo el uso de los metales, como el oro y la plata.
Los sitios más importantes de este período continuaron siendo el centro de México (Cacaxtla, Xochicalco, Tula), el área maya (Ceibal, Lamanai, Uxmal, Chichén Itzá, Sayil) y la Costa del Golfo de México (El Tajín).
El Período Posclásico
El Período Posclásico se sitúa entre el 900 o 1000 d. C. y abarca el ocaso de las culturas del Período Clásico, el apogeo de las civilizaciones maya, tolteca y azteca y el fin de Mesoamérica en el año 1521 d. C., cuando se produjo la conquista española. Esta etapa se caracterizó por los conflictos bélicos y los avances tecnológicos y arquitectónicos. En esta fase también aumentó el uso de metales para la fabricación de joyas y herramientas.
El Período Posclásico Temprano
El Período Posclásico Temprano comprende desde los años 900 o 1000 d.C. hasta el 1250 d. C. En esta etapa floreció la cultura tolteca, en Tula, y crecieron las conexiones culturales entre el norte y el centro del área maya (Tulum, Chichén Itzá, Mayapán y Ek Balam).
Otros sitios que continuaron ejerciendo su influencia fueron Cholula, Oaxaca y El Tajín.
Posclásico Tardío (1250 – 1521)
El Período Posclásico Tardío se desarrolló entre el 1250 d. C. y el 1521 d. C. En este tiempo surgió el imperio azteca, que logró también dominar a otras culturas. Los aztecas construyeron templos monumentales, desarrollaron un calendario de 365 días y se distinguieron por sus conocimientos de medicina, meteorología y astronomía.
Sin embargo, con la llegada de los españoles, el imperio azteca cayó y se produjo el fin de las grandes civilizaciones mesoamericanas.
Los sitios posclásicos más importantes fueron Tenochtitlán, Cholula y Tepoztlán en México Central; Cempoala en el Golfo; Yagul y Mitla en Oaxaca; Mayapán, Tayasal, Utatlán y Mixco Viejo en el área maya y Tzintzuntzan en el oeste de México.
El Período Colonial
El Período Colonial comenzó en 1521, con la caída de la capital azteca de Tenochtitlán y la rendición de Cuauhtémoc a Hernán Cortés. En 1524 también se produjo la caída de los mayas de los actuales territorios guatemaltecos ante Pedro de Alvarado.
Desde entonces, Mesoamérica se convirtió en una colonia española y las culturas mesoamericanas sufrieron grandes transformaciones; en muchos casos, a partir del siglo XVI, estas culturas se extinguieron. Por un lado, la población mesoamericana se redujo enormemente debido a los conflictos con los conquistadores, las enfermedades que estos trajeron y los trabajos forzados que les obligaron a hacer. Posteriormente, durante las misiones y la conversión al cristianismo, también se perdieron muchas de las tradiciones y costumbres religiosas mesoamericanas originarias.
El Período Colonial finalizó en 1821, cuando los criollos, españoles nacidos en los antiguos territorios mesoamericanos, comenzaron a independizarse de España.
Otras cronologías
Además de la cronología convencional, en los últimos años se desarrollaron otras líneas de tiempo, teniendo como base criterios diferentes. Algunos ejemplos son las cronologías de Piñá Chan y Duverger.
Cronología de Piñá Chan
El arqueólogo mexicano Ramón Piñá Chan creó una línea de tiempo basada en las actividades de la vida cotidiana de las culturas mesoamericanas, que comienza varios siglos antes que la cronología tradicional y culmina con la conquista española:
- Período de cazadores y recolectores nómadas (30000 -5 000 a. C.)
- Preagrícola (30000 – 7000 a. C.)
- Protoagrícola (7000 – 5000 a. C.)
- Período de comunidades sedentarias (5000 – 1200 a. C.)
- Agrícola incipiente (5000 – 2000 a. C.)
- Agrícola aldeano (2000 – 1200 a. C.)
- Período de pueblos y estados teocráticos (1200 a. C. – 900 d. C.)
- Aldeas y centros ceremoniales (1200 a. C. – 200 d. C.)
- Centros urbanos (200 d. C. – 800 d. C.)
- Período de pueblos y estados militaristas (1200 a. C. – 900 d. C.)
- Ciudades y señoríos militaristas (900 d. C. – 1200 d. C.)
- Señoríos y metrópolis imperialistas (1200 d. C. – 1521 d. C.)
Cronología de Duverger
El antropólogo francés Christian Duverger, en cambio, considera que el inicio de Mesoamérica fue posterior a la aparición de la cerámica y sugiere que su fin no fue abrupto, sino un proceso de mestizaje, de unión de culturas, que se extendió más allá de la conquista. Duverger dividió a la historia mesoamericana en cinco épocas:
- Época I – Horizonte olmeca (1200 a. C. – 600 a. C.)
- Época II – Florecimientos regionales (600 a. C. – 200 d. C.)
- Época III – Mesoamérica bipolar (200 d. C. – 800 d. C.)
- Época IV – Horizonte tolteca (800 d. C. – 1300 d. C.)
- Época V – Horizonte azteca (1300 d. C. – 1519 d. C.)
Fuentes
- Florescano, E. Los orígenes del poder en Mesoamérica. (2010). México. Fondo de Cultura Económica.
- Torres Rodríguez, A. Mesoamérica: Retrato Cultural del Territorio. (2020). España. Ediciones Alféizar.
- López Austin, A.; López Luján, L. La periodización de la historia mesoamericana. Arqueología mexicana. Disponible aquí.
- Piña Chan, R. (2018, 31 de agosto). Un modelo de evolución social y cultural del México precolombino. Cuadernos del Departamento de Monumentos Prehispánicos, serie Arqueología, núm. 2, INAH, 1976. Disponible aquí.